Emergencia en la CDMX, lejos de laxitudes y permisividades

Francisco Rodríguez

La Ciudad de México es la tercera más grande del mundo y, potencialmente, una de las más explosivas de todas. Ayer resistió un terremoto de 7.1 grados Richter —aunque la percepción generalizada es que se percibió como si hubiese sido del máximo, de 10— y, aunque la emergencia persiste, hoy puede decirse que la CDMX salió indemne de este trago amargo. Nada que ver con lo sucedido tras el sismo de 1985, replicado exactamente 32 años después.